Hace unas semanas han pasado por Oviedo un grupo de amigos provenientes de las regiones Vasco- Francesas, también de Guipuzcoa, Vizcaya, Alava, Navarra, Cataluña, Cantabria, y creo que alguno más pero vamos eran alrededor de 50 personas que de paso hacia Santiago, con motivo del Año Santo han efectuado una parada en Oviedo, para visitar al Salvador en su Catedral, los distintos monumentos ovetenses, que les han encantado, y además pasear un poco por calles y plazas en una Ciudad con un encanto especial.
Por pura coherencia el Paseo ovetense entre otros itinerarios, siempre debe de incluir una visita al extraordinario Fontán, especialmente en su horario matutino, porque refleja perfectamente la filosofia ovetense y recoge todas las esencias locales de muchos años de tradición u forma de ser. Los visitantes se quedan fascinados.
Ciertamente el Fontán no es lo que era......ni por aproximación, todo ha sido muy devaluado, modificado y perjudicado excepto los edificios que curiosamente a mi me gustan, aunque sean un poco imitación en realidad lo que se ha conseguido con unas casas en ruinas, es rehabilitarlas y adaptarlas al siglo XXI, con mayor o menor acierto pero por lo menos una asepsia y unas normas higiénicas se cumplen.....algunos ya no se acuerdan que por los años 1950 muchos ovetenses su higiene personal se realizaba en grandes calderos de zinc, sencillamente porque los edificios no estaban preparados adecuadamente. La modernidad era imprescindible.
Hasta aquí es cuestión de estética, otra cosa es haber sabido mantener y conservar, tal como han hecho en muchas ciudades españolas, la esencia de los Mercados y sus sistemas de mercadeo, eso en oviedo practicamente ha desaparecido, Oviedo se ha llenado de supermercados, grandes superficies y centros comerciales, con lo cual a las tiendas pequeñas, al comercio de barrio y a los mercados de barrio pracrticamente los han "barrido" porque con las grandes empresas, que además tienen una serie de ventajas en las compras, resulta muy dificil competir y siempre acaban ganado cuando cuentan con las bendiciones oficiales, crecen unos y desaparecen los otros pequeños y modestos.
En Oviedo ha desparecido la Plaza del Pescado, ubicada en un espacio singular ahora reconvertido en un Restaurante municipal, han reconvertido la plaa de la carne en un "mixto" que recoge todas las actividades, pescado, carne, embutidos, productos de la huerta, quesos, conservas, panaderia, fruteria, dietética, chuches, etc., etc. etc. y que en un espacio moderno y aséptico se esfuerzan por sobrevivir con mas o menos suerte.
Pero hay otro Fontán, dinámico, rural, popular, típico al cual la Corporación Municipal es muy poco sensible, principalmente se forma los jueves y sabados con los produc tos del campo ovetense, las frutas y hortalizas caseras, las especialidades, los productos típicos superfrescos y que son una delicia degustar, eso también existe en oviedo, ciertamente maltratado, con los artículos alimentarios por los suelos, todo un poco cutre, pero con todo son originales, autóstonos, naturales y tienen su clientela, que acude, compra y reitera...POR ALGO SERÁ.
Otro Fontán lo forman las diferentes tiendas mixtas asentadas casi con caracter de fijas, como el puesto de periódicos y el de paraguas, por cierto el de paraguas creo que lleva más de 50 años vendiendo sus productos en el Fontán.....VAYA MÉRITO.
También están las flores, ésta especialidad es típica en españa en todos los mercados populares , siempre eisten puestos de flores y plantas, en oviedo también , algunos con gran tradición y mucha experiencia, por ejemplo Feli lleva más de 50 años también atendiendo sus clientes en el mercado popular de las flores, hay puestos de gente más joven e incluso especialistas en plantas diversas que aportan un colorido y una diversidad muy interesante.
Todavía me queda una nueva aportación los mercados de ropa usada, de zapatos y zapatillas y los puestos que ultimamente abundan en exceso de bragas y sujetadores, airosamente expuestos y promocionados diariamente, porque ´çestos comercios ni tienen pausa, ni descanso......a mi me parecen impropios y un contrasentido, creo que perjudican mas que benefician y deberían de estar en otra ubicación.
Y para el Fontán ser completo nos falta la Hosteleria, los caldos, cafés y pinchos que desde las 6 horas de la madrugada se sirven a compradores y vendedores, en los diversos establecimientos de hosteleria, más de 12 ubicados en los alrededores del espacio mercantil, para mi gusto destaco Casa Ramón situado en un edificio hermoso perfectamente rehabilitado y adornado con cientos de geraneos de colores, allí sus pinchos son famosos y los caldos de gallina mañaneros quitan el frio y la humedad a buenos y malos, un establecimiento singular, que también es Restaurante y Sidreria y es la alegria de la plaza interior que permanece para disfrute de clientes y vecinos en el interior de los edificios que limitan con la Plaza de Velarde.
Y hablando de la plaza de Velarde creo que siempre deberemos de citar el edificio más singular del entorno, el Palacio del Marqués de San Feliz, gran casa, excelente jardin y perfectamente conservado, repleto de obras de arte y excepcional entre todas las excepcionalidades, algo parecido al gran edificio actualmente dedicado a Biblioteca Pública, rehabilitado y utilizado para una actividad que en los tiempos de internet resulta original permanecer con instalaciones dedicadas a facilitar libros y consultar hemerotecas, sus gastos los paga el Gobierno del Principado y supongo que será todo de gran utilidad pública.
Mucho da de sí el Fontán, al igual que todos los Mercados públicos en cualquier localidad, que han estado a punto de desaparecer por la incompetencia de los responsables y dirigentes políticos de turno, pero en la actualidad en gran moda y expansión, en proceso de recuperación y cada vez cuentan con mayor beneplácito y participación de la ciudadanía, Así se conservan las tradiciones y costumbres.
El Fontán en oviedo está de moda.
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